Esta foto tomada de la página en Facebook de Michaele Salahi muestra a Michaele, derecha, y su esposo Tareq Salai, con el representante Patrick Kennedy, izquierda, supuestamente en una foto tomada en una cena en Washington DC el 26 de septiembre del 2009 en la que habló el presidente Barack Obama.
Copias de los mensajes electrónicos enviados entre los colados a la Casa Blanca y un funcionario del Pentágono socavan las afirmaciones de la pareja, de que fueron invitados al primer banquete de Estado del presidente Barack Obama.
Tareq y Michaele Salahi presionaron durante cuatro días a un amigable asistente del Pentágono para que les consiguiera invitaciones para el gran acontecimiento.
Por admisión propia en los mensajes electrónicos, se presentaron en la entrada de la Casa Blanca a las 6:30 de la tarde del 24 de noviembre sin invitación "sólo para ver, en caso de que nos aceptaran, en vista de que no sabíamos y nuestro nombre sí estaba en la lista".
El Servicio Secreto, sin embargo, ha dicho que no estaban en la lista y que cometieron un error al dejarlos entrar de cualquier forma.
En un e-mail enviado al funcionario del Pentágono Michele Jones, apenas unas horas después del banquete, los Salahi afirmaron que la batería baja de su teléfono celular les había impedido escuchar el mensaje que les dejó Jones ese día temprano, avisándoles que no habían sido incluidos en la lista de invitados.
Copias de una serie de mensajes electrónicos entre los Salahi y Jones fueron obtenidos por The Associated Press el martes por la noche de una fuente que los consiguió de una manera que confirmaron su autenticidad.
La intrusión en la Casa Blanca la semana pasada cautivó a la capital estadounidense, donde la vida social en las altas esferas de la política y la presencia de celebridades le dan brillo a la mundana vida cotidiana del gobierno. El Congreso también tendrá una audiencia para conocer el caso con mayor detalle.
El presidente Barack Obama y la primera dama, Michelle, estaban muy contrariados por el incidente, según se informó y los Salahi pidieron enérgicamente por televisión a su audiencia nacional que se les creyera su versión, de que una serie de mensajes electrónicos probarían que habían sido invitados al banquete de Estado, en honor del primer ministro de la India, en visita oficial.
El vicepresidente Joe Biden, que posó para fotografías con los colados durante la cena oficial, dijo el miércoles que no conocía a la pareja, pero supuso que eran invitados.
"Pensé, como todos los demás, que eran invitados. Actuaban como si conocieran a todos en el salón", dijo Biden en entrevistas a las cadenas televisivas NBC y CBS. Actuaban, agregó, "como si fueran mis viejos amigos".
Cuando se le preguntó si creía que la pareja debía enfrentar cargos delictivos por asistir sin invitación, respondió que no era de su incumbencia.
Biden afirmó que estaba "completamente satisfecho" con el Servicio Secreto, que dijo "hace un gran trabajo protegiéndonos a mí y a mi familia".
No buscan dinero. La publicista Mahogany Jones dijo en un mensaje de correo electrónico el lunes que tales señalamientos contra Michaele y Tareq Salahi son falsos y exigió que "esta información adversa y errónea cese de forma inmediata".
Un ejecutivo, quien pidió no ser identificado debido a que la cadena para la que trabaja no difunde públicamente tales asuntos, afirmó a The Associated Press el domingo que representantes de la pareja se pusieron en contacto con medios informativos para instarlos a "presentar sus ofertas (económicas)" por una entrevista.
Según el ejecutivo, la pareja de Virginia estaba buscando un pago del rango intermedio de los seis dígitos, lo que indica que se ubica en alrededor de medio millón de dólares.
Las divisiones noticiosas de algunos canales televisivos han dicho que su política les impide pagar por una entrevista, pero anteriormente, en el caso de entrevistas buscadas ávidamente, ellos han ofrecido pagar a cambio de material exclusivo, como fotografías o videos.
Michaele Salahi, quien ha sido mostrada en la cena cuando saludaba tanto a Obama como al vicepresidente Joe Biden, es candidata para estelarizar un programa de "telerrealidad", concretamente uno realizado por la cadena Bravo y titulado "The Real Housewives of D.C."
Por otro lado, el principal senador demócrata de la Comisión de Seguridad Nacional de la cámara baja pidió que el director del servicio secreto y la pareja testifiquen sobre el incidente vergonzoso del jueves.
Bennie Thompson dijo que quiere respuestas respecto al grave error de los miembros del servicio secreto, quienes permitieron que la pareja acudiera a la cena del presidente Barack Obama y su esposa Michelle Obama el 24 de noviembre a pesar de que sus nombres no estaban en la lista de invitados.
La pareja no realizará declaraciones ni hará arreglos para hablar con los medios de comunicación, dijo Jones. Una aparición de los Salahi planeada para el lunes por la noche en el programa "Larry King Live" del canal CNN fue cancelada.
Algunos legisladores han pedido que se presenten cargos penales contra la pareja, pero el servicio secreto aún no lo ha hecho. No fue posible localizar alguno de sus voceros de forma inmediata para hacer declaraciones sobre el tema.
Copias de los mensajes electrónicos enviados entre los colados a la Casa Blanca y un funcionario del Pentágono socavan las afirmaciones de la pareja, de que fueron invitados al primer banquete de Estado del presidente Barack Obama.
Tareq y Michaele Salahi presionaron durante cuatro días a un amigable asistente del Pentágono para que les consiguiera invitaciones para el gran acontecimiento.
Por admisión propia en los mensajes electrónicos, se presentaron en la entrada de la Casa Blanca a las 6:30 de la tarde del 24 de noviembre sin invitación "sólo para ver, en caso de que nos aceptaran, en vista de que no sabíamos y nuestro nombre sí estaba en la lista".
El Servicio Secreto, sin embargo, ha dicho que no estaban en la lista y que cometieron un error al dejarlos entrar de cualquier forma.
En un e-mail enviado al funcionario del Pentágono Michele Jones, apenas unas horas después del banquete, los Salahi afirmaron que la batería baja de su teléfono celular les había impedido escuchar el mensaje que les dejó Jones ese día temprano, avisándoles que no habían sido incluidos en la lista de invitados.
Copias de una serie de mensajes electrónicos entre los Salahi y Jones fueron obtenidos por The Associated Press el martes por la noche de una fuente que los consiguió de una manera que confirmaron su autenticidad.
La intrusión en la Casa Blanca la semana pasada cautivó a la capital estadounidense, donde la vida social en las altas esferas de la política y la presencia de celebridades le dan brillo a la mundana vida cotidiana del gobierno. El Congreso también tendrá una audiencia para conocer el caso con mayor detalle.
El presidente Barack Obama y la primera dama, Michelle, estaban muy contrariados por el incidente, según se informó y los Salahi pidieron enérgicamente por televisión a su audiencia nacional que se les creyera su versión, de que una serie de mensajes electrónicos probarían que habían sido invitados al banquete de Estado, en honor del primer ministro de la India, en visita oficial.
El vicepresidente Joe Biden, que posó para fotografías con los colados durante la cena oficial, dijo el miércoles que no conocía a la pareja, pero supuso que eran invitados.
"Pensé, como todos los demás, que eran invitados. Actuaban como si conocieran a todos en el salón", dijo Biden en entrevistas a las cadenas televisivas NBC y CBS. Actuaban, agregó, "como si fueran mis viejos amigos".
Cuando se le preguntó si creía que la pareja debía enfrentar cargos delictivos por asistir sin invitación, respondió que no era de su incumbencia.
Biden afirmó que estaba "completamente satisfecho" con el Servicio Secreto, que dijo "hace un gran trabajo protegiéndonos a mí y a mi familia".
No buscan dinero. La publicista Mahogany Jones dijo en un mensaje de correo electrónico el lunes que tales señalamientos contra Michaele y Tareq Salahi son falsos y exigió que "esta información adversa y errónea cese de forma inmediata".
Un ejecutivo, quien pidió no ser identificado debido a que la cadena para la que trabaja no difunde públicamente tales asuntos, afirmó a The Associated Press el domingo que representantes de la pareja se pusieron en contacto con medios informativos para instarlos a "presentar sus ofertas (económicas)" por una entrevista.
Según el ejecutivo, la pareja de Virginia estaba buscando un pago del rango intermedio de los seis dígitos, lo que indica que se ubica en alrededor de medio millón de dólares.
Las divisiones noticiosas de algunos canales televisivos han dicho que su política les impide pagar por una entrevista, pero anteriormente, en el caso de entrevistas buscadas ávidamente, ellos han ofrecido pagar a cambio de material exclusivo, como fotografías o videos.
Michaele Salahi, quien ha sido mostrada en la cena cuando saludaba tanto a Obama como al vicepresidente Joe Biden, es candidata para estelarizar un programa de "telerrealidad", concretamente uno realizado por la cadena Bravo y titulado "The Real Housewives of D.C."
Por otro lado, el principal senador demócrata de la Comisión de Seguridad Nacional de la cámara baja pidió que el director del servicio secreto y la pareja testifiquen sobre el incidente vergonzoso del jueves.
Bennie Thompson dijo que quiere respuestas respecto al grave error de los miembros del servicio secreto, quienes permitieron que la pareja acudiera a la cena del presidente Barack Obama y su esposa Michelle Obama el 24 de noviembre a pesar de que sus nombres no estaban en la lista de invitados.
La pareja no realizará declaraciones ni hará arreglos para hablar con los medios de comunicación, dijo Jones. Una aparición de los Salahi planeada para el lunes por la noche en el programa "Larry King Live" del canal CNN fue cancelada.
Algunos legisladores han pedido que se presenten cargos penales contra la pareja, pero el servicio secreto aún no lo ha hecho. No fue posible localizar alguno de sus voceros de forma inmediata para hacer declaraciones sobre el tema.